Resulta evidente que una colección de invierno se caracteriza ante todo por la búsqueda de holgura, comodidad y calor. Se trata de sentirse confortable con prendas que van a responder a las necesidades específicas de esta temporada.
Los tejidos escogidos son más densos y protegen frente al frío y la lluvia. El crepe es el gran protagonista de esta temporada. Valérie lo ha escogido en negro, rojo vivo y marrón.
Es posible también incluir tejidos más ligeros en una colección de invierno, ya que van a dar una impresión de fluidez. Hay una alegre e innovadora mezcla entre los creps gruesos y los tules que armonizan en un efecto sorprendente.
La elección de un tejido con reflejos de cuero rosado da un toque chic al conjunto. Propone modelos adaptados a fiestas y ceremonias, donde hay que ir elegante.
Pantalones, faldas, vestidos, blusas y abrigos se cruzan en una línea de colorido a la moda. El eterno negro trae su intensidad y su gusto por la elegancia. Permite refinar la silueta que se hace más longilínea. El rojo resalta la alegría de quien lo lleva. Los tonos pasteles también están presentes con un estampado multicolor creado especialmente por la estilista para mostrar esta colección.
Cada mujer puede encontrar su modelo en esta colección pensada para resaltar la silueta en un estilo elegante y de femenino.
La colección propone sencillez para el día a día y también para salidas entre amigas. También resalta por su originalidad para instantes más específicos, como una ceremonia, ofreciendo creatividad, innovación y dinamismo.
Por último, impone la sofisticación y un toque de lujo para días festivos.